Lo que nos inspira

Lo primero, antes: Qué, Cómo, Por qué. Learn by doing


Javier Morterero

Estoy participando en un máster sobre Innovación Educativa de dos años de duración.  Yo mismo y mis compañer@s nos preguntamos enseguida. Y esto ¿Qué aplicación práctica tiene en el día a día en aula? ¿Para qué me servirá? ¿Da solución a los problemas muy concretos que cada día tengo frente a frente?

Creo que la respuesta es Si y No ambas a la vez.

NO porque en un comienzo antes de ponerme a actuar es para mí  muy importante saber a dónde quiero ir. Buscar el QUÉ es para mi educar. QUÉ quiere mi alumn@, cual es su necesidad y su interés genuino, QUÉ quiere el resto de la comunidad educativa. Y para ello no hay otro caminos que escuchar

Y una vez escuchado (yo mismo, mi alumnado y mi comunidad) me marco un rumbo para alcanzar una meta que ya he decidido y consensuado con el resto del EQUIPO de trabajo docente y de comunidad educativa. Ahora ya SÍ toca la primera parte del CÓMO llegamos hasta allí.

Y ya en este momento comienza el SÍ. Lo primero antes

que busco ya resultados de mis acciones orientadas. quizás más que para obtenerlos buenos, que me encantan, sobre todo para obtener en el periodo de tiempo más breve posible, una retroalimentación – feedback valioso para ir cambiando, adaptándome y corrigiendo el rumbo de la deriva que la realidad nos trae  siempre. y aquí entra de lleno el tema de la formación.

Sin duda aquí yo elijo: ¿Cómo estoy en este trabajo (en general en la vida. es una actitud)? ¿desde el saber o desde el aprender?

Yo, desde hace un poco de tiempo me fui desde el saber y he elegido el aprender. Soy mucho más feliz. cada día hay una o muchas cosas nuevas que me hacen mejorar mi desempeño.

Y aquí vuelve a ser no. Reconozco mi ignorancia sobre temas de base, de conceptualización que no tengo otra solución que ponerme a estudiar y aprenderlos. Que si competencia clave, que si capacidades, que si destreza, que si habilidades, que si indicadores, que si estándares, que si  neurociencia, que si … y tantos otros. y aquí es verdad que la aplicación práctica inmediata es poca. Pero absolutamente imprescindible para luego pasar a la práctica educativa de manera eficiente, sabiendo qué estoy haciendo, para qué lo estoy haciendo y por qué estoy en ello.

Y ahora si que la forma de aplicar, implementar, pone en marcha lo aprendido es real, tengo resultado. ahora sí voy al día a día. Pero siempre en este barco hay un vigía y que tiene la vista puesta en el destino, en el horizonte. y el resto del tiempo  práctica – aplicación –corrección. Ya si voy a la receta, al programa, a la aplicación, a método.

De no ser así, me encuentro con una montaña de prácticas innovadoras, de recetas múltiples que al final van a formas de educar que muchas veces no son las deseables para el siglo XXII que será en el que estén viviendo nuestro alumnado.

Y es verdad que no es lineal.

Que el aprendizaje continuado hará que temas que me parecían viables en un momento al cabo del tiempo (cada vez más corto) ya no me convenzan. así que el proceso aprender – aplicar lo aprendido  será un continuo que viene a recordarno que verdaderamente también se aprende nuestro oficio haciendo con el ya famoso “learn by doing

Javier Morterero

Co fundador Posada del Candil y docente desde hace más de 30 años



Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *